Montando el unicornio

La naturaleza para seguir con la especie. Ese impulso, esa necesidad es tan poderosa que no te puedes escapar de ella sin abonar una serie de consecuencias deplorables para tu salud en todos los niveles, físico, emocional, mental, espiritual.

El llamado de la naturaleza

Cuando nos vimos y le hablé de su falta de ética, trató de explicar que todo pasó en los años setenta. Que estaba bien porque las mujeres querían el semen de un hombre con estudios superiores. Mucho mejor que el de un policía, por ejemplo, añadió